Su debut, “My Sweet Angel”, combina pop nostálgico, guitarras brillantes y la magia de los soundtracks y la radio de finales de los 90 y principios de los 2000.
Lola Summers crea canciones como si fueran películas de sus sueños. Su enfoque, un poco lynchiano febril, evoca el espíritu de finales de los 90 y principios de los 2000. Por eso, My Sweet Angel, su single debut, es una verdadera canción de sensaciones. Evoca un atardecer tardío de verano, un paseo en bicicleta o la prefiesta con amigas que termina siendo más divertida que la propia fiesta. Lola Summers te transporta con apenas tres acordes a las radios de los 2000. Hayas vivido o no esa época, te sentirás como en casa, envuelta en un pop naive de guitarras que brillan. Toma prestados los elementos más potentes de las paletas musicales noventera y dosmilera (desde Hilary Duff a Mazzy Star), resultando en una melodía reconfortante, una versión Radio Disney del dream pop. todo en el mejor de los sentidos.
Todo empezó con un desafío: escribir 100 canciones durante 100 días. Lola quería crear antes
de presentarse al mundo:
“Escribí 100 canciones antes de decidir sacar esta. Y sí: la vasta mayoría son malas. Algunas son muy malas. Pero era una forma de comprobar si estaba segura de hacer música, de encontrar mi sonido, de saber quién soy cuando cojo una guitarra. No buscaba la perfección; de hecho, casi siempre la evito. Sólo quiero encontrar un lugar, mi lugar, desde el que soñar a gusto».
No fue hasta finales de sus 25 que Lola empezó a componer. Sevillana afincada en Barcelona, ha trabajado como periodista cultural y analista de datos, hasta que finalmente se ha decidido por la música.
“Escuchar música ha sido siempre lo que más sentido le ha dado a mi vida, pero no ha sido hasta bien entrados mis 20 que me he permitido pensar en crearla yo misma”.
Desde lo más pop hasta lo más complejo, las influencias de Lola Summers son variadas y eclécticas: desde los soundtracks de Disney y Lana del Rey hasta Los Planetas, Frank Zappa, Teenage Funclub, pasando por Paramore, Pulp y Arctic Monkeys.
Coproducida por Calderon FM, quien también se encargó de la mezcla y masterización, My Sweet Angel sale a la luz en un momento marcado por un revival de estética nostálgica, que, para Summer, es especial:
«La nostalgia a veces se percibe como algo negativo, pero a mi me hace muy feliz.
Siento que protege aquellas cosas que nos hacen sentir seguras y en paz, y alimenta nuestro mundo interior. Para mi, la infancia, que es cuando nos permitimos imaginar sin tapujos, es la base de mi mundo interior. Tengo que alimentarlo».
Sobre el objetivo del single, Lola concluye con humor:
“Si consigo que al menos el tipo más duro sienta lo que sienten las chicas entregadas al romance, esa obsesión como adolescente, me doy por satisfecha.”
El sencillo se lanzó el 26 de septiembre y ya está disponible en todas las plataformas digitales.